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Llega la primavera, y llegan las hormigas. Son un auténtico quebradero de cabeza, pero no todo está perdido. Os presentamos los mejores trucos para que las hormigas no entren en casa.
A medida que suben las temperaturas y los días se alargan, las hormigas comienzan a salir de sus hormigueros para explorar nuevos lugares donde recoger provisiones para el próximo invierno. Es entonces cuando empieza la pesadilla para muchas personas que ven cómo hileras interminables de hormigas invaden su casa. ¡Que no cunda el pánico! Aunque este tipo de plagas son un fastidio, podemos tomar una serie de medidas de precaución y, si la situación se descontrola, acabar con ella de raíz. A continuación os dejamos algunos trucos para que las hormigas no entren en casa.
Cuidado con la basura
Las hormigas son insectos con un sentido del olfato hiperdesarrollado. Si además les das facilidades, su visita está asegurada. Los fuertes olores procedentes de la basura, en especial de alimentos y restos de dulces, frutas, tomate, etc., son muy atrayentes para las hormigas, por lo que debemos cuidarnos de no dejarlos expuestos. Para ello, es muy importante asegurarnos que el cubo de la basura está herméticamente cerrado y no tiene manchas o restos adheridos en el exterior. También es un buen momento para ser más cuidadosos con los restos que dejamos en la encimera o en el suelo, como las típicas migas de pan que dejamos hasta la próxima ocasión en la que barreremos.
Elimina a la mensajera
Antes de tener a todo el hormiguero en tu casa, seguro que verás a alguna hormiga solitarias y aparentemente inofensiva. Es el momento de prevenir y acabar no solo con ella, sino con las sustancias químicas que va segregando como un camino de miguitas de pan que seguirá el resto de la colonia. Para eliminar o camuflar el rastro de olor puedes utilizar vinagre o polvos de talco. También es útil colocar plantas aromáticas en la entrada de la casa o en zonas del jardín donde quieras evitar que aparezcan hormigas. Las más eficaces son el romero, la menta o la hierbabuena.
Localiza el hormiguero
Si tienes una idea aproximada de dónde se encuentra el hormiguero que te está haciendo la vida imposible, puedes atacar con artillería pesada. Aunque existen multitud de productos químicos destinados a este fin, un truco casero y barato es verter agua hirviendo sobre el hormiguero.
Hay personas que ponen pimienta molida o canela en algunos puntos estratégicos de entrada a la casa, como quicios de puertas o pequeños orificios en las ventanas.
Ya están aquí…
Demasiado tarde. Las hormigas han decidido hacer una excursión por tu cocina. Y por mucho que las elimines en masa vuelven a aparecer un rato después. El rastro que han dejado, funciona, y no van a abandonar su ruta. En estos casos, son varios los trucos caseros que podemos utilizar: harina de maíz para cortarle el camino, zumo de limón para confundirlas, granos de café para repelerlas o incluso borax mezclado con agua y azúcar.
Todos ellos son métodos naturales con una eficacia moderada. Pero si el problema con las hormigas comienza a ser serio, debes plantearte usar productos químicos; desde insecticidas potentes (siempre con cuidado de que no entren en contacto con la comida o utensilios de cocina), hasta trampas con venenos para hormigas que estas llevan al hormiguero.
¿Conoces otros trucos para que las hormigas no entren en casa?