Desde que tengo Puntomatic en casa no suelo tener problemas con las manchas. Sin embargo, nunca viene mal una ayudita cuando la mancha es muy grande o de alguno de los tipos considerados especiales. A menudo me soléis consultar cómo quitar manchas de grasa sin que el proceso se eternice y sin estropear la prenda. No sólo por su complejidad aparente, también por lo escandalosa que es (¡no hay forma de disimularla!) y por lo habitual que es mancharse de algún producto graso.
Aceite, pintalabios, grasa de motor… hay múltiples versiones de “manchas de grasa” y ninguna es recibida con los brazos abiertos.
Si estáis en esa tesitura y no sabéis cómo quitar manchas de grasa, ¡tranquilos!. Que reine la calma, porque hay muchas probabilidades de salvar vuestra prenda.
En primer lugar, como siempre, echadle un vistazo a la etiqueta de lavado, para no incumplir ninguna de las reglas de la misma.
Si la mancha es fresca, poned polvo de talco o sal (en abundancia) sobre la misma. Con esto absorberéis la grasa que aún no haya penetrado en el tejido. Tras esperar unos minutos, retirad el producto con cuidado e intentando que no se expanda por el resto de la prenda.
A continuación, recurrid al vinagre blanco. Es un poderoso desengrasante que se utiliza para limpiar muy a menudo. Echad sobre la mancha y frotad, si es necesario, con un pequeño cepillo.
Tras aclarar el vinagre con agua, podéis introducir la prenda en la lavadora con el resto de la colada. Colocad un par de pastillas Puntomatic en el cajetín de la lavadora, o una cápsula directamente en el fondo del tambor. Por último, seleccionad el programa que necesitéis.
Por último, ¡no uséis secadora!. Y es que, en caso de que quede algún resto de mancha, lo único que conseguiréis será fijarla.
Saludos, Mateo
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